Momentos antes de que empiece la pomposa celebración de su centésimo cumpleaños, Allan Karlsson decide que nada de eso van con él. Vestido con su mejor traje y unas pantuflas, se encarama a un ventana y se fuga de la residencia de ancianos en la que vive, dejado plantados al alcalde y a la prensa local.
Sin saber adonde ir, se encamina a la estación de autobuses, el único sitio donde es posible pasar desapercibido. Allí, mientras esperaba la llegada del primer autobús, un joven le pide que vigile su maleta, con la mala fortuna de que el autobús llega antes de que el joven regrese y Allan, sin pensarlo dos veces, se sube con la maleta, ignorante de que en el interior de ésta se apilan, millones de coronas de dudosa procedencia.
Pero Allan no es un abuelo fácil de amilanar. A lo largo de su centenaria vida ha tenido un montón de experiencias de los más singulares: desde inverosímiles encuentros con personajes como Franco, Stalin o Churchill, hasta amistades comprometedores como la esposa de Mao, pasando por actividades de alto riesgo como ser agente de la CIA o ayudar a Oppenheimer a crear la bomba atómica.
Sin embargo, esta vez, en su enésima aventura, cuando creía que con su jubilación había llegado la tranquilidad, está a punto de poner el país patas arriba.
Jonas Jonasson ha urdido una historia extremadamente audaz e ingeniosa, capaz de sorprender constantemente al lector, y cuyo verdadero regalo es su personaje protagonista, un hombre de un maravilloso sentido común, un abuelo sin prejuicios que no está dispuesto a renunciar al placer de vivir.
Autor: Jonas Jonasson
Editorial: Círculo de Lectores
ISBN: 978.846.725.108.1
Mi valoración: 4 lápices.
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